martes, 29 de mayo de 2018

La evolución del paisaje de Miguel Echauri

La exposición acerca de nuestro pintor, dedicada a sus paisajes, sigue teniendo lugar en la galería de la calle San Antón, 6 de Pamplona, en el horario habitual
Como hemos comentado, nuestra intención ha sido, además de rendir un homenaje a Miguel Echauri, ofrecer una visión de la evolución de este género, cultivado con asiduidad por Miguel, y en que, al lo largo de tantos años, ha expresado su sensibilidad, su técnica pictórica y su deseo de expresión.
Ahora quisiéramos exponer una breve reflexión sobre los paisajes de su última etapa, etapa de madurez plena, que puede situarse en los últimos años del siglo XX, y recoge su amplia experiencia, no sólo técnica, sino también expresiva.
En esos años, superada la etapa de protagonismo absoluto de los tonos de la tierra, de paisajes deshechos, en los que predomina lo matérico sobre lo lineal; la década de los ochenta da paso a una obra con mayor predominio del dibujo, aunque, como parte constituyente de su estilo, continúa con su incesante investigación en las infinitas variaciones del color, siempre en torno a los ocres. La piedra afianza su dominio sobre la tierra, se imponen los paisajes rocosos y la piedra adquiere un singular protagonismo.
Y todavía es posible asistir a una nuevo enriquecimiento posterior, una evolución casi imperceptible, como son los cambios en Miguel Echauri: lentos, meditados, profundos.
En los últimos años del siglo aparecen, poco a poco, como tímidamente, diferentes tonos de verdes que reaniman sus paisajes, antes casi carentes de vida; en una hermosa y tenue primavera crepuscular, y de de la misma manera, los cielos, que hasta entonces se teñían con el color y  la fuerza expresiva del resto de la composición: cielos negros, verdes, grises, amarillos o terrosos, admiten nubes, luces de atardecer y diferentes efectos de movimiento atmosférico.
Añadimos algunas fotos de detalles que ilustran esta reflexión, y, de nuevo, invitamos que los vean directamente.







miércoles, 2 de mayo de 2018

Miguel Echauri. Paisajes


Ya está inaugurada la nueva exposición titulada "Miguel Echauri. Paisajes" en la galería Fermín Echauri 2, Galería de la Fundación, en la calle San Antón, 6 de Pamplona.
La muestra permanecerá abierta, al menos, durante todo este mes de mayo, con los horarios habituales (de lunes a viernes de 10 a 2 y de 5.30 a 8)
En esta exposición, la Fundación ha querido hacer un homenaje a su pintor, mostrando obras en las que aparece un género cultivado por él durante toda su carrera, y en el que consigue, quizás, sus mayores logros estéticos. A los largo de su corta época de aprendizaje con el pintor navarro Javier Ciga, hizo sus primeros ensayos de paisaje, copiando obras de su maestro. Luego, ya introducido en el oficio de pintor, durante su estancia en Uruguay, cultivó un tipo de paisaje que seguramente allí mereció el calificativo de "Español", al aparecer en ellos grupos de casas apiñadas en torno a una iglesia o castillo en lo alto, en los que, a veces, se incluye una plaza de toros.
Más tarde, ya vuelto a España e instalado en su Pamplona natal, realiza unos paisajes de gran fuerza, en los que la tierra, lo telúrico, adquiere un gran protagonismo. Paisajes deshecho, lunares, desérticos, en los que hasta el cielo se tiñe con los colores de la tierra: ocres, amarillos, pardos, terracotas, grises, negros, llenos de expresividad y contrastes. En ellos, a veces, se observa una mujer velada, que aporta dimensión humana y dramatismo, a la vez que un toque de misterio y desolación.
Los años ochenta, especialmente en torno a la exposición "Diálogos con la piedra" aparece un cambio de técnica pictórica, al mismo tiempo que lo hacen las piedras, verdaderas protagonistas de sus composiciones paisajísticas. La piedra trae consigo un progresivo interés por la línea y el dibujo, por los contrates nítidos de luces y sombras, por un afán descriptivo de las superficies y sus calidades.
Y todavía, su obra, ya madura, habría de experimentar un nuevo cambio y una nueva evolución; pues, en torno a los noventa y durante los primeros años del siglo XXI, se aprecia un claro interés por enriquecer su tradicional paleta de ocres, añadiendo algunos verdes sutiles, rosas y azulados, y un progresivo interés por las nubes, cielos cambiantes y efectos atmosféricos.
En esta exposición "Miguel Echauri. Paisajes" se ha procurado ofrecer, a lo largo de 25 obras, óleos sobre lienzo o tabla, diferentes ejemplos de su evolución artística, y, sobre todo, ofrecer una ocasión única de disfrutar de estas obras profundas, fuertemente expresivas y de gran hondura.
En la Fundación queremos organizar diferentes actividades en relación con esta muestra de las que avisaremos oportunamente, como visitas guiadas y conferencias.